domingo, 29 de noviembre de 2009

Barcelona 1 - Madrid 0. El Madrid perdona, el Barca no.


El triunfo del Barcelona, merecido desde mi punto de vista, sigue haciendo más profunda la herida en el modelo futbolístico del Real Madrid.

Prueba fiel de esto es la cantidad de canteranos que jugaron en el partido de hoy, de bando y bando. Por el Madrid, que yo recuerde, Casillas y Raúl. Por los Culés Valdés, Puyol, Piquet, Busquets, Xavi, Iniesta y Messi.

Por esto, el "objetivo" comentario de los Boixos de ESPN (Wolff, Palomo, Kempes y compañía) estuvo hoy, lo reconozco, muy adecuado "Billetera no mata cantera".

El pobre Pelegrini, que se muestra cada vez más afectado por la situación de su equipo, dificilmente terminará la temporada en el banquillo del Bernabeu. Y es que estoy empezando a creer que el agua del estadio blanco tiene algo, que va corrompiendo las cualidades técnicas de los dirigentes que llegan a la casa merengue.

De otro modo es incompresible como hoy el "Ingeniero" sacó a Ronaldo y metió a Benzema. ¿Qué fue para proteger el tobillo del luso? Quizás. Pero no creo que desde que llego al Madrid, tanto el técnico como el juegador hayan tenido un momento más necesario para demostras que valen todo el dinero que se invirtió en ellos.

Ese momento, justo despúes de la expulsión de Busquets, era el momento de sacar al Madrid más ofensivo. El chileno dudó, y no tomó la mejor decisión para este partido. Quizás haya sido la mejor para toda la temporada, pero con la directiva, la afición y la prensa madrileña encima de ti, tal vez no fue lo más adecuado.

Esa decisión no marcó el partido, pero pudo haber cambiado la cara del Madrid. Un Madrid que perdona en repetidas ocasiones, las oportunidades que sus rivales no regalan.

Igual sigo pensando que salir de Pelegrini sería un error. El Real necesita un proyecto a largo plazo, fuerte en todas las áreas. Y eso sólo se logra sacrificando los resultados. Como lo sufrió el Barcelona en su momento. Y como tocará sufrir al Madrid, si quieren construir de verdad una alternativa deportiva, y no una nueva era de fracasos "galácticos".